Me levanto a las 2 y 1/2 de la mañana, había
quedado con Emilia Ramos, en el área de bellaterra, para desplazarnos en un
solo coche hasta Pratdip que era el lugar de la caminada.
La salida estaba prevista a las 6 h,
nosotros a las 4 h 45´ya estábamos allí, no éramos los primeros, pero si
pudimos aparcar bastante cerca de la salida, cosa que el 1º año no fue así, con tanta antelación tuvimos
tiempo de coger la documentación y la
camiseta que nos dieron y llevarla al coche, ½ h más tarde aquello se estaba
animando, saludamos a varios compañeros del club, y tuvimos tiempo para tomar café,
y cambiar impresiones varias, no solo de las caminadas, también del partido de
futbol, la final de la copa del rey, entre el R. Madrid, y el At de Madrid, con el resultado de 1 a 2 a favor
del At de Madrid.
Dieron la salida era de noche, y aun hacía falta
el frontal para ver donde pisabas, Emilia no llevaba frontal, así que se pegó a
mí para poder ver, no fue difícil, ya que enseguida apareció la luz del día, y
el camino no era complicado, hasta que aparecieron las primeras rampas, cuando
llegamos a lo más alto del 1º sector las vistas eran bonitas, con los primeros rayos de sol, con
las nubes entre cortadas, y la mar de fondo. El 1º control se encontraba en el
punto de salida, a la distancia de 9 km
el total del 1º sector, tardamos 2 h en hacerlo, un donuts un zumo y vuelta a empezar.
Empezamos el 2º sector, esta vez en dirección
contraria, de seguida empezaron las subidas, y los tramos más complicados de
toda la caminada, como veréis en las fotos, muchas piedras, hay que echar manos
de unas cuerdas, y también de unos escalones de cadena de hierro, para poder
subir, el viento cada vez era más frio,
y se notaba aún más después de la sudada que nos aviamos metido, más tarde el viento había amainado, el camino era más llevadero y llegamos al 2º control,
esta vez en LLaberia, aquí si pudimos comer algo más , un bocadillo cerveza y
fruta, a partir de aquí se inicia la bajada más técnica del recorrido, hasta
llegar de nuevo a Pratdip 3º control, llevábamos unos 24 km , cogimos agua,
algo de fruta, y empezamos el 3º sector.
Este sigue la dirección del primero, aunque no tardamos mucho en desviarnos, con
una nueva subida larga pero llevadera, en ese momento se hizo un grupo de 8 o
10 personas que íbamos haciendo la goma, hasta llegar al control 4º en la ermita de santa María, aquí también había
de todo para comer y beber, sobre todo fruta, es lo que mejor entra en el cuerpo, de nuevo
una pequeña subida, para iniciar la bajada que nos llevaría a Vandellós, control
5º, km 38 más o menos, faltaba poco para llegar cuando nos tuvimos que poner el
chubasquero, el tiempo había cambiado, no duro mucho el parar de llover, así
hasta el final , por tres o cuatro veces nos lo tuvimos que poner. Hasta llegar
de nuevo a LLaberia,
control 8º es un constante subir y bajar, sin demasiada
dificultad, a excepción del último km que es bastante fuerte, a partir de aquí un
par de subidas más o menos llevaderas,
para llegar al final, los últimos 5 km son de bajada, situación que
aprovechamos para correr y ganar algo de tiempo. En esta caminada fuimos Emilia
y yo todo el día junto, a tramos también nos acompañaba, Javi Borras, y Martin
Cartoixa de la ciudad de Tortosa, sin olvidarnos de Martin Cano, y Sergi Cano,
en total 61 km y un desnivel acumulable de 5915 m, en 12 h y 57´dos horas menos
que hace dos años. En general una marxa dura, pero muy bien organizada, tanto
en los avituallamientos como en la señalización.
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